Organizan:
Excelentísimo Ayuntamiento de Fernán-Núñez y Centro Andaluz de las Letras.
14 de Noviembre de 2014
Cuando Juan Jesús, el
bibliotecario, me llamó para comunicarme que iba a encargarme de la
presentación de Alejandro, mi alegría fue elevada al cuadrado, pues no sólo
porque es uno de mis escritores predilectos de la literatura y la poesía
actual, (fe de ello pueden dar mis compañeras del Club de Lectura) sino porque
es, ante todo y sobre todo, una persona sencilla. Es dueño de una sencillez diáfana,
amable y generosa.
En el mundo de la moda “La sencillez hace la elegancia”, dicen.
En el de la literatura, en este intricado mundo en el que lo único que parece
importar es alcanzar el Statu Quo en el
menor tiempo posible, poniendo a la luz el mayor número, también posible de publicaciones,
posean o no calidad, en este mundo “La
sencillez hace la humildad y con ello, la ausencia de vanidad e hipocresía
”
Profundo
conocedor de la naturaleza, hecho este que se pone plenamente de manifiesto en
toda su obra y que aprendió de sus ancestros, “Me
hice escritor gracias a los pastores, que me hicieron descifrar el lenguaje de
la naturaleza” ha comentado en más de ocasión. Esto hace que, cuando
nos sumergimos en cualquiera de sus
libros, nos transformemos, casi sin darnos cuenta, en sinestésicos lectores que
asisten, con los cinco sentidos, a todo cuanto el escritor va narrando, pues
Alejandro posee la maravillosa virtud de retratar paisajes y paisanajes con una
alquimista precisión, para que nosotros
podamos ver, sentir, tocar, oler: la fragancia de la hierbaluisa, el vuelo del
alcaudón, el rumor de los arroyos o la
sinfonía del viento entre las hojas.
Su encomiable capacidad para describir, tanto las múltiples caras de la felicidad que
puede adoptar el corazón, como las más infinitas tristuras que el alma sea
capaz de soportar, no deja a nadie indiferente (...)
María Rosa Laguna
Alejandro, junto a parte del "Club de Lectura "El Sembrador de Palabras"
Gracias Alejandro por regalarnos tu, siempre grata presencia. Y a mis compañeras de "El Sembrador de Palabras", que no me fallan nunca.