25 febrero, 2008

"Virginia Wolf"



Ríos de tinta se han escrito sobre esta escritora inglesa; tanto por sus admiradores como por sus detractores; yo tengo el placer de incluirme en el primer grupo. Para sus detractores, Virginia Wolf, sólo era una snob que escribía libros que rozaban el histerismo y la desmesurada estética, y que compartía sus ratos libres, con un grupo de egocéntricos que no hacían otra cosa, que dorarse la píldora unos a otros.
En su defensa, los admiradores y seguidores de su obra decían que, fue una de las grandes intelectuales del siglo veinte, y sobre todo una feminista que fue marcando el camino a las posteriores luchadoras de los sesenta.

Yo me voy a limitar, en este caso a opinar sólo sobre su obra.
Esta escritora llego hasta mi o, yo hasta ella, como se quiera entender, cuando hace unos años leí su novela “La señora Dalloway”; donde describe con una percepción agudísima, el mundo que le rodea. Me cautivó su narrativa desde un principio. Virginia poseía una extrema sensibilidad, y así lo demuestran sus textos. Es capaz de hacernos sentir, percibir, todo aquello que va describiendo. Toca la fibra, con una dulzura y maestría impresionante. Tiene la virtud de hacernos oler una flor, o escuchar el sonido del viento, de las aguas de un riachuelo, del canto de un pájaro, mientras se lee su obra. Posteriormente a la novela que acabo de citar, adquirí “Las Olas” “El cuarto de Jacob” o “Noche y día”. Pero si se desea conocer con más profundidad y de una forma cronológica, la obra literaria de V. Wolf, en cuanto a relatos breves se refiere, sin lugar a dudas se debe leer, “Relatos Completos” presentado por la editorial –Alianza Tres-. En este libro, se recopilan los relatos cortos publicados tanto en vida de la autora, como los póstumos, o inéditos. Ofreciendo así, una visión totalizadora de sus evolución narrativa. Cuatrocientas dieciséis páginas que, desde luego, no dejarán indiferente a los amantes de la literatura.

Gracias, como siempre, a quién está haciendo posible que, mi colección literaria aumente, con tan preciados tesoros; al rey de mi vida, sin lugar a dudas, mi hijo.

Hace apenas dos meses, la editorial –Maeva- editó un libro con el título “Las mujeres que escriben, también son peligrosas”, y donde se incluye a Virginia Wolf, es la última referencia que tengo de esta autora, pero como a pesar de tener este ejemplar, aún no lo he leído, y no me gusta opinar sobre aquello que no conozco, prefiero dejar, por ahora, sólo ese dato.











"Las Mujeres Que Escriben tambien son peligrosas"



Con un tamaño, poco habitual, para una recopilación biográfica; un diseño sencillo pero de una elegancia exquisita, la editorial –Maeva- publicó en los últimos meses del pasado año 2007, el segundo volumen, dedicado a las mujeres que desde el siglo XII, hasta nuestros días, han ido dejando su huella, más o menos profunda, en la literatura, un terreno reservado mayoritariamente, a los hombres, donde, hasta casi mediados del siglo XX, las mujeres que escribían, tenían que hacerlo bajo seudónimos masculinos, para ocultar el supuesto acto de rebeldía. El primer volumen, se titula –Las mujeres, que leen, también son peligrosas-.

Un atractivo, y completísimo prólogo de Esther Tusquets, va introduciendo al lector, en lo que será, una de las colecciones biográfico-literarias, más completa, que hasta ahora he leído. Fotografías, manuscritos, grabados, litografías, tanto de las escritoras, como de sus obras, van ilustrando, paulatinamente, todas y cada una de las páginas de este libro, escrito por –Stefan Bollmann-.

Hildegard Von Bingen, Christine de Pizan, Germaine de Stael, Aurore Dupin(George Sand), jane Austin, Las hermanas Bronté, Selma Lagerfog, Las niñas, -Ana Frank y Shophie Scholl-, Emilia Pardo Bazan, Carson McCullers, Marguerite Durás…, hasta llegar a nuestros días, con escritoras de renombre, como Paula fox, Toni Morrison, Assia Djebar, o Isabe Allende. Todas y cada una, de estas mujeres, de estas escritoras, vivió o vive, en un mundo diferente, una época diferente; donde su lucha, su perseverancia, su forma de escribir, de expresar, de describir, todo ese mundo que les rodea, les ha hecho llegar a ocupar un lugar relevante en la literatura. Muchas de ellas, tuvieron que ocultar su verdadero nombre, bajo seudónimo, como le ocurrió a –Cecilia Bolh de Faber- que publicó, y la seguimos conociendo, incluso hoy, como –Fernán Caballero-.
Ha llamado mi atención, una de las fotografías que aparecen en este libro, en concreto la de, Aurora Dupin (George Sand) Fue tomada por Félix Nadar en 1864; el mismo que fotografió, durante los últimos años de su vida a –Charles Baudelaire.

Sin lugar a dudas, recomiendo este libro, tanto para aquellos que se inicien en el maravilloso mundo de la literatura, como para los profundos conocedores de ésta.


























19 febrero, 2008

"CSI. La guía definitiva"



A simple vista puede parecer un libro oportunista que, tan sólo aprovecha, el alto índice de audiencia de la serie televisiva –CSI-, ya que, el autor, toma como referencia determinados episodios de ésta, para realizar un exhaustivo estudio, con todo lujo de detalles, sobre las técnicas empleadas para analizar y procesar los datos que se recogen, en el escenario de un delito, sea de la índole que sea.
El prólogo de –Jerry Bruckheimer- productor de la serie, nos irá introduciendo paulatinamente, en todos y cada uno de los elementos que componen –el kit de campo- maletín imprescindible para la recogida de pruebas.
Fotografias en muchos casos tridimensionales, no dejarán indiferente al lector. Toxicología, entomología, ADN, balística, reconstrucciones faciales y análisis audiovisuales son, entre otras muchas pruebas, las que se muestran en este libro, sin dejar aparte, la función que, cada uno de los componentes del grupo CSI, cumple en la investigación. Tal vez sea, como he dicho al principio y, a simple vista, un libro oportunista pero cuando se lee, lo único de oportunista, son las imágenes de los actores de la serie, que se toman como referencia. Por lo demás es un estudio, un profundizaje completo, en ese trabajo, algo morboso, porque negarlo que realizan cada día los investigadores científico-forenses- bien sea de campo o de laboratorio; y que sin ellos, sin sus conocimientos y su dedicación, muchos de los crímenes cometidos, quedarían impunes.
Diré que, en nuestro país, se publicó en el año 2004 otro libro de las mismas características, pero sin ilustraciones que, no por ello, deja de ser menos interesante, sobre la policía científica española. “CSI casos reales españoles”, editado por –La esfera de los libros-. Su autor –Carlos Berbell-. En este caso, el prologo es del escritor, periodista y comentarista de radio, -Luís del Val-.

En definitiva, dos libros, para los amantes de la lectura científica. Esa que, el rey de mi vida, sabe que me fascina y, tal vez por eso, tuvo el gratificante detalle de regalarme.



13 febrero, 2008

-Kindle- "El IPod De los Libros"


        
 (Amazon)

El pasado 19 de noviembre, la compañía de comercio electrónico –Amazon- , hizo la presentación oficial del nuevo y revolucionario, -lector digital-. Tiene un tamaño de 6 pulgadas y una resolución máxima de 800 x 600 píxeles, su capacidad de almacenamiento es de, hasta noventa mil títulos. Su nombre –Kindle- y es el nuevo “iPod de los libros”. Su precio (278 euros). Ha comenzado a venderse sólo en Estados unidos, pero los pedidos a través de la red, están ya agotados. Pero, ni que decir tiene que, en breve, el planeta entero estará lleno de estos artilugios de la nueva era digital. En España, el mundo que rodea al libro, se ha puesto en alerta. Los más catastrofistas, vaticinan, la desaparición de libros, librerías y bibliotecas, por lo menos, tal y como las conocemos en la actualidad. -Kindle-, no sólo ofrece las ventajas, de almacenamientos de cientos de títulos, sino, la incorporación de diccionarios, iluminación variable de la pantalla, y la posibilidad de dar formato a las letras, para adaptarlas a gusto personal.

En un informe publicado en el diario –El país- el pasado mes de diciembre, por Jesús Ruiz Mantilla, ofrece las opiniones de los diferentes profesionales, que rodean al mundo del libro. “Yo sí me imagino un mundo sin libreros”, asegura el responsable de área de mass Market, del grupo –Planeta-, incluso Beatriz Moura, dueña de la editorial –Tusquet- ve su futuro un tanto oscuro.
Si nos situamos en el plano económico. –Kindle- podría terminar con los porcentajes que se llevan, tanto, libreros, distribuidor y editorial; pues el autor, sólo tendría que colgar sus obras en la red, ni que decir tiene que, cobrando sus derechos de autor, claro está. Con este nuevo aparato no sólo se pueden leer uno y mil títulos literarios también permite el acceso a los más importantes de Estados Unidos, que para eso son los lumbreras del aparatito, sino que también se encuentran disponibles, algunos de los periódicos europeos, como –Le Monde- o el –Frankfurter Allgemeine-
Pero por si este caos fuera poco; en los primeros días de este mes de Febrero, -Amazon- ha vuelto a sorprender, ahora, con el lanzamiento de este formato, pero, en audio.

Mientras, este artefacto (literario-internauta), mantiene en jaque a todos y quienes directa o indirectamente, viven de los libros, yo, me pregunto ¿Será posible que llegue un día, en el que el libro desaparezca? Francamente, creo que no. O por lo menos, no, en muchos años, que digo…..nunca, mientras haya bibliotecas. Soy de las que piensan y, como yo, seguro que miles de personas más; que por muchos aparatos electrónicos, por mucha era digital, por muchos –Kindle-, nada supera a la placentera sensación que conlleva, el tener un libro entre las manos. Disfrutar de, su tacto, su olor a tinta fresca o, percibir el paso de los años en la añejes de sus páginas. El placer de vivir, una y mil aventuras, mientras vamos desgranando sus entrañas, en cada párrafo, en cada capítulo. El placer de conocer y compartir la vida de todos y cada uno de los personajes que, en ellos, nos iremos encontrando. Es como si, sujetásemos sus almas, sus corazones, sus vidas, sus destinos, entre nuestras manos, para que nada les ocurra y, así, hacerles llegar, sanos y salvos, para que nos cuenten el final de su historia. Para los amantes de la lectura, no les resultará extraño, lo que acabo de describir. Los libros, al fin y al cabo, son vida…..la que nosotros le damos, al abrirlos, y la que ellos nos cuentan.... Confidencialmente.